Hay un solo lugar en el mundo en el que los superautos pueden medir su velocidad máxima. Hay una sola pista en todo el planeta que permite superar los 400 km/h sin interrupciones.
Ehra-Lessien está ubicado en el distrito de Gifhorn, en el estado de Lower Saxony, en Alemania. Es una pista de pruebas que pertenece al Grupo Volkswagen. Fue construida en 1965, en plena Guerra Fría, en una zona de exclusión aérea.
Todo el circuito cuenta con una longitud total de 96 km y su anchura permite la habilitación de tres carriles. Sus dimensiones son ideales para evaluar la performance de autos nuevos y/o prototipos.
Por ser parte del Grupo VAG, su tránsito está restringido para los vehículos de las marcas que abarca la compañía, es decir: Audi, Volkswagen, SEAT, Skoda, Bentley, Lamborghini y Bugatti. Aunque no siempre fue así.
En 1998, el McLaren F1 fue probado en las instalaciones del Ehra-Lessien por el piloto británico Andy Wallace, ganador de las 24 Horas de Le Mans en 1988 y de las 24 Horas de Daytona en tres oportunidades (1990, 1997 y 1999). Aquella vez, el superdeportivo alcanzó una velocidad máxima de 390 km/h.
Bugatti Veyron: su mayor protagonista
El Bugatti Veyron pasó a la historia como el auto más rápido del mundo tras establecer un récord de velocidad de 408 km/h en el 2005. ¿En dónde lo logró? Pues en nada menos que en Ehra-Lessien. Cinco años después, el Bugatti Veyron Super Sport impuso un nuevo récord de 431 km/h en el mismo lugar.
Pero, ¿qué hace a Ehra-Lessien el lugar ideal para probar la velocidad máxima de vehículos convencionales y, sobre todo, de superdeportivos? La respuesta es sencilla y la encontramos en la pista más grande de todo el circuito que cuenta con una recta de casi 9 kilómetros (8.7 para ser exactos).
De acuerdo a las descripciones que dan sobre esta peculiar longitud del trazado libre de curvas, todo el sector es totalmente plano y nivelado; sin embargo, los extremos son imposibles de verse debido a la curvatura de la tierra.
Pueden existir amplias pistas como el del Centro Espacial Kennedy donde el Hennessey Venom GT destronó al Veyron Super Sport como el más rápido del mundo al alcanzar los 435 km/h. No obstante, no ofrecen las facilidades del caso. El superdeportivo de John Hennessey nunca pudo registrar su récord Guinness ya que no se le permitió repetir la hazaña en la dirección contraria.
Por estos y otros detalles, el Ehra-Lessien continúa siendo el único lugar del mundo donde los superautos pueden ser acelerados a fondo sin ningún inconveniente. Y será en esta misma pista en el que el Bugatti Chiron intentará registrar un nuevo registro de máxima velocidad en 2018.
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