Recomendaciones de Nissan ante una emergencia frente al volante.
Algunas familias cuentan los días para salir de la ciudad y disfrutar de un fin de semana largo por los feriados de Semana Santa. Y para aquellos que cuentan con un vehículo, la marca automotriz Nissan compartió con el blog de NeoAuto.com tips de cómo reaccionar en casos de emergencia y frente al volante. Atentos a los siguientes consejos.
Si una llanta se pincha en plena ruta…
– Desacelerar lentamente hasta detener el vehículo (frenar bruscamente puede ser peligroso) y estacionar a un lado de la pista (zona de emergencia), así evitaremos obstaculizar el tránsito.
– Ya detenido, inspeccionar el daño. Si es severo y se pierde la presión del aire muy rápido, usar la llanta de repuesto (en buen estado) y reemplazarla por una llanta adecuada tan rápido como sea posible.
– Por precaución, medir la presión de todas las llantas.
– Luego de revisar los cuatro neumáticos y verificar su estado, continuar con el recorrido
Si el vehículo se detiene en el trayecto…
– Primer paso: Verificar las luces de advertencia que aparecen en el tablero del vehículo y consultar el manual del conductor.
– Segundo paso: Revisar y verificar que los niveles de aceite y refrigerantes del motor estén dentro de sus rangos mínimos y máximos.
– Tercer paso: Verificar que no existan fugas de ningún tipo y encender el motor con el capó levantado para detectar alguna anormalidad al encenderlo. Si el auto empieza a fallar o se apaga, lo mejor es ser remolcado o ayudado por otro automóvil hasta el centro de servicio mecánico más próximo. Comprobar, también, si el vehículo ha pasado la zona en que presentó fallas (mucha altitud, pendiente muy pronunciada, sobrepeso; etc.)
Si en pleno recorrido sale humo del motor…
– Detener el auto inmediatamente para evitar, en cualquier caso, empeorar el incidente.
– Inspeccionar el porqué de la falla abriendo el capó con precaución, pues el humo puede ser originado por un sobrecalentamiento.
– Si es un sobrecalentamiento, significa que no hay una suficiente lubricación y/o refrigeración. Será necesario revisar los niveles de aceite y refrigerantes, e inspeccionar las zonas aledañas a los depósitos de estos fluidos para confirmar si hay fugas, pues pueden estar en contacto con el motor caliente y los vapores pueden verse como humo saliendo del motor.
– Si el problema del humo se debe a la fuga de algún líquido (como los mencionados anteriormente) y puede ser solucionado parcialmente, entonces no habría mayor dificultad hasta el cambio del componente dañado (cuanto antes mejor).
– Si no existen fugas y los niveles son correctos, probablemente se trate de un problema interno entre las piezas del motor. Es preferible detener el auto y solicitar apoyo técnico, o ser remolcado por una grúa.
– Si el problema de humo se debe a un corto circuito, también es importante identificar de dónde proviene y no tratar de reparar la falla; en su lugar pedir ayuda para ser trasladado a un centro de servicio y reemplazar las partes dañadas.
