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Seguridad pasiva y activa

publicado por neoauto noviembre 5, 2010 0 comentarios

Uno de los aspectos que ha adquirido mayor relevancia en la industria automotriz es el de la seguridad. Conforme la tecnología del automóvil ha permitido alcanzar mayor velocidad y más potencia, así como fabricar vehículos más compactos y ligeros, también ha sido necesario brindar nuevos sistemas y componentes que aseguren el buen desempeño del vehículo y la seguridad de los ocupantes.

Sobre todo para el caso de las ciudades modernas, en donde el tráfico y el incremento del parque automotor son factores para la ocurrencia de accidentes. Por ello los fabricantes invierten fuertes sumas para hacer de los automóviles medios de transporte cada vez más seguros y confiables. Así, por ejemplo, hoy se cuenta con diferentes tipos de airbags, asientos más confortables y dispositivos que permiten bloquear los sistemas eléctricos y de combustible en caso de un accidente, entre otros.

Daños reducidos

Buena parte de los sistemas que ahora vemos en los modelos de serie provienen de innovaciones que en su momento fueron aplicadas en la alta competencia, como la Fórmula 1.

Los sistemas de seguridad se dividen en pasivos y activos. En el caso de los primeros, se trata de todos aquellos componentes que buscan reducir los daños o efectos de un accidente sobre los ocupantes de un vehículo.

En este grupo se encuentran los cinturones de seguridad, los reposacabezas, los airbags, los dispositivos de seguridad para niños, entre otros. Así, por ejemplo, existen reposacabezas que ante un golpe posterior absorben parte del impacto para reducir el riesgo de lesiones cervicales. En el caso de los airbags, existen los de dos fases (regulan su acción según la intensidad del impacto) y los laterales de tipo cortina.

Prevención automática

Otro dispositivo, habitual en algunas marcas, permite desconectar automáticamente un borne de la batería para evitar un cortocircuito tras un choque. Otros sistemas activan las luces de emergencia y del interior del vehículo, así como abren de manera automática las puertas luego de un accidente.

En el caso de la seguridad activa, se trata de todos aquellos sistemas y dispositivos que permiten evitar los accidentes. La mayoría de estos mecanismos se activan de forma automática y su acción es preventiva. De esta manera, existen los que adecuan el desempeño del auto a diferentes exigencias de manejo, incluso en casos extremos. Ejemplo de ello son los frenos con ABS y los sistemas antipatinaje que permiten una adherencia adecuada al acelerar y mantener el control.

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